¡No te olvides de la muselina o la gasa! Puede que tu bebé no tenga problema alguno a la hora de eructar o que regurgite un poco o mucho de leche. (Hay bebés que no regurgitan nada en absoluto).

Los bebés, a menudo, tragan aire mientras se alimentan tanto en con pecho como con biberón. El aire se queda atrapado en sus pequeños estomaguitos y necesita liberarse, ya que, de lo contrario, puede resultarles muy doloroso y que lloren desconsolados. El mejor momento para eructar es a la mitad o justo después de darles de comer. Si tu bebé se queda dormido mientras come o justo después y no te da tiempo a hacerle eructar, no te preocupes: no todos los bebés tienen que eructar antes de dormir. Los bebés alimentados con el pecho suelen tragar menos aire que los que se alimentan con el biberón, así que puede que no sea necesario que eructen tras cada comida. Te darás cuenta de si necesitan eructar porque se retorcerán y se quejarán.

Cómo hacer eructar a tu bebé

Para ayudar a que tu bebé expulse el aire que ha tragado, céntrate en el lado izquierdo de su espalda que es donde se encuentra el estómago y frota, da palmaditas o masajea esa zona con delicadeza hasta que escuches el eructo y vuelva a estar. Hay diversas formas de hacer esto:

  • Sujeta a tu bebé en vertical sobre tu hombro con una mano bajo su culete y usa la otra para darle palmaditas suaves en la espalda.
  • Coloca una mano estirada sobre el pecho de tu bebé y sujeta su barbilla con el pulgar y el índice, sienta al bebé con delicadeza en tu regazo y dale palmaditas con la otra en la espalda.
  • Tumba al bebé bocabajo sobre tus rodillas (su tripita estará sobre una de tus piernas, su cabeza sobre la otra de lado). Con una mano sujeta al bebé y con la otra frota o da palmaditas sobre su espalda.

Probablemente tengas que probar diversas formas para ver la que mejor funciona con tu bebé. En cuanto sepas cuál es la mejor manera de hacerle eructar, tan solo tardarás un par de minutos. Después, te recomendamos que lo mantengas en vertical unos 20 o 30 minutos, si tiene tendencia al reflujo.

Hacer eructar a bebés más mayores

En cuanto el bebé sea un poco más mayor y controle mejor su cabeza, otra forma de hacer que eructe es colocarlo en vertical delante de ti, mirando hacia fuera, mientras dais un pequeño paseo. Asegúrate de poner una mano bajo su culete y presionar con el otro brazo ligeramente su estómago. El movimiento de caminar y la ligera presión le ayudará a eructar.

Cuando tienen dos meses, probablemente eructen por sí mismos. Entre los cuatro y seis meses, más o menos, los músculos de su cuello y estómago se habrán fortalecido y no tragarán tanto aire.